"La historia del hombre, decía Octavio Paz, podría reducirse a la de las relaciones entre las palabras y el pensamiento. Cuando los representantes gubernamentales no llevaron hasta el final los puntos de los acuerdos que surgieron de las negociaciones [las de San Andrés Larrainzar] violentaron un principio que de tan antiguo es sagrado para los indígenas: la palabra. Cuando las palabras se corrompen y los significados se vuelven inciertos, agregaba el poeta, el sentido de los actos se torna inseguro. Seis años después, la inseguridad define el panorama."
Juan Veledíaz¹

Uno de los más graves y extendidos problemas de nuestra región latinoamericana es el de las minorías raciales. Fuente de innumerables conflictos velados o disimulados por nuestra sociedad occidentalizada.

En México, un sonoro y rotundo ¡Ya Basta! pronunciado por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) ha pretendido darle voz al otro México, el México de los sin voz, al México primigenio que sistemáticamente ha sido hecho a un lado, olvidado, acallado o simplemente ignorado. El México indígena.

Este proceso de desmexicanización del indígena ha sido tan bién llevado a cabo que uno de los peores insultos que puedes decir a un mexicano es simplemente: "indio".

Así, hoy día, los grupos indígenas mexicanos han sido relegados a comunidades aisladas, generalmente soguzgadas por algún cacique local perteneciente a, o aliado con, el partido en el poder. Y, a través, de este proceso han sido excluídos al inconsciente mexicano, pasando a formar parte de la sombra junguiana del mexicano moderno.

El desconocimiento de los grupos indígenas mexicanos es tal, que el mexicano promedio desconoce en lo absoluto su composición, distribución y, en muchos casos, su problemática. Sólo hasta el surgimiento del EZLN la opinión pública en gran escala ha comenzado a interesarse en ellos.

Cuando en 1994 el EZLN surgió, puso fin al sueño neoliberal de un México primermundista. Develando la realidad de las minorías marginadas de un México sumido en la pobreza y el abandono. 

Hoy, a 7 años de su surgimiento, el EZLN es nuevamente objeto de una atención universal y de las más variadas críticas y acusaciones.

Se le acusa principalmente de ser dirigido por un encapuchado no indígena que fuma pipa y porta un reloj importado. De haber perdido el rumbo y sucumbido a los más variados interéses políticos, sociales y económicos. Incluso se ha llegado a decir que las grandes concentraciones de uranio y petróleo en el territorio chiapaneco son el verdadero móvil para que ciertos grupos de poder internacionales hallan generado el conflicto.

Se le acusa de ser víctima de un caudillismo a ultranza que entorpece el diálogo y el proceso de paz. De ser incongruente al defender los derechos humanos y ser un grupo armado. Y hasta de cometer, o ser responsables de, diversos actos terroristas que lesionan la integridad del mexicano.

Sus simpatizantes, la mayoría debo decir, lo elogian y colocan como modelo de la postguerrilla. Un ejemplo de lo que la guerrilla del futuro podría llegar a ser. Una guerrilla que prefiere hacer la guerra con palabras antes que con municiones. Una guerrilla ilustrada, si existe tal cosa. Lo cierto es que el EZLN enfoca, a mi parecer, más las energías del 3er  y 2do rayos que las del 1ero. Utiliza la mente iluminada en actividad inteligente para emprender más un proceso educativo que destructivo.

La postura gubernamental ha variado desde la negación, el no-reconocimiento, la repulsión, la mentira, el incumplimiento y la traición (Salinas); pasando por el diálogo encubierto, la minimización, la desacreditación, la persecución, la emboscada y el impasse (Zedillo); hasta la franca (pero temerosa) voluntad de diálogo para la solución del conflicto (Fox).

La caída de la "dictadura perfecta", es decir la transición del poder de manos del partido oficial (PRI, 71 años en el poder) a la oposición (PAN), ha terminado con el impasse y presenta una oportunidad real de paz inmediata con miras a establecer los fundamentos de una paz duradera. Diálogo que sino tiene como base los Principios y Leyes para la Era entrante no conducirá a ningún lado².

El EZLN en respuesta a la voluntad de diálogo y pacificación de la Presidencia (El primer acto del Presidente Fox fue enviar la iniciativa de ley propuesta por la COCOPA -fruto de los Acuerdos de San Andrés- al Congreso para su aprobación), ha decidido emprender un recorrido por 12 Estados de la República Mexicana desde Chiapas hasta la Ciudad de México para retomar el diálogo. Para ello ha establecido 3 condiciones previas: 1) la desmilitarización de Chiapas, 2) el cumplimiento de los Acuerdos de San Andrés y 3) la libertad de sus presos políticos. El gobierno ha cumplido en parte estas 3 peticiones. Sin embargo el Congreso no ha tocado para nada la iniciativa y al parecer no lo hará en un buen tiempo.

Mientras tanto las acusaciones contra el EZLN crecen y las posturas se radicalizan. Lamentablemente los grupos más radicales son la Iglesia, la ala dura del Partido Acción Nacional (PAN - partido en el poder) y del Partido Revolucionario Insititucional (PRI), así como diversos empresarios, presidentes de cámaras de comercio, senadores y gobernadores de los partidos antes mencionados.

El EZLN tiene planeado salir el 24 de febrero de Chiapas, el grupo de los que vendrá está compuesto de varios de sus comandantes y el subcomandate Marcos. Los preparativos para la visita comienzan y las dos televisoras privadas más importantes del país (Televisa y TV Azteca) han dejado a un lado sus ya proverbiales diferencias y su mutua animadversión para lanzar juntos una campaña por la Paz. Y aunque la mayoría del pueblo mexicano aboga por la paz, los grupos radicales ya mencionados amenazan abiertamente al EZLN de no cruzar por "su" territorio. El gobernador del Estado de Querétaro dice que en caso de que los zapatistas crucen por "su" Estado, el se encargará de aprehenderlos, mientras que en una postura todavía más radical, el diputado panista del congreso del Estado de Morelos: Salomón Salgado le advierte a Marcos, a quien llama "maricón", que hay brigadas de ajusticiamiento esperándolos para hacerlos salir "en ataud".

Me pregunto: ¿Qué bien le hacen estas declaraciones al proceso de paz? ¿Se darán cuenta de las graves implicaciones que tendría un acto terrorista en contra de los embajadores del EZLN, no sólo sobre el proceso de paz, sino sobre todo el proceso de transición democrática del país? ¿Serán estos hombres sólo una especie de enconados legisladores terroristas, o habrá realmente algunos grupos obscuros interezados en bloquear el proceso de paz?

OBSERVO una oportunidad real para sentar las bases para una paz duradera y disipar un fragmento de la sombra del pueblo mexicano. RECONOZCO la necesidad de una apertura y de una fresca y nueva visión sobre el conflicto, no sólo de parte del EZLN y la presidencia, sino de todo el gobierno mexicano, los intelectuales, los grupos de poder y la opinión pública en general. REVELO la existencia de una sombra profunda y antiguamente arraigada y de un espejismo básico ocultamente denominado: "La Gran Herejía de la Separatividad", así como de múltiples espejismos menores gravitando al rededor de esta dual estructura.

Existe la necesidad real y urgente de IMPEDIR que el amor a sí mismos, el amor al poder y el amor a las viejas estructuras ya cadúcas obstaculice el proceso de paz, ANULANDO con ello las declaraciones de los grupos extremistas y DESTRUYENDO así, los gérmenes del mal que habitan en la conciencia del pueblo mexicano.

¡El que nuestra Luz unida IMPIDA, ANULE y DESTRUYA el espejismo de la separatividad es mi más sincera plegaria!